Un herpes o un afta en la o cara (o cabeza) (conocidas también como “sapitos” en boca) es molesto. Nos incomodan o duelen, no podemos comer bien, o tragar o hablar.
El problema mayor es que pueden tener complicaciones muy severas, o cuando son recurrentes, o se asocian a una infección.
Con los herpes sucede lo siguiente: primero la etapa prodrómica (no hay síntomas), luego pica y aparece inflamación con la zona enrojecida, luego las vesículas, luego úlceras, “cascaritas” o escamas y finalmente nueva piel (son 6 etapas). Y eso pasa en los labios, en las comisuras, en la lengua, y en otras partes de la boca, cara y otras partes del cuerpo. Afectan mucosa y piel. Y son MUY CONTAGIOSOS!
Hay dos herpes habituales: el herpes simple, que no conlleva grandes consecuencias y el herpes zoster que puede llegar a afectar nervios, alterando la capa que los recubre –la mielina- y perder funcionalidad. Incluso provocar parálisis, y parestesias o anestesias en la cara o boca. Y las temibles neuralgias.
Si bien hemos escuchado que estas lesiones son pasajeras, lo cierto es que en muchos casos las consecuencias son muy severas, y, sin tratamiento, son permanentes.
¿Qué hacer?
Los tratamientos con Láser Terapéutico o Terapia Fotobiomoduladora, logran mejorar el cuadro o eliminarlo. Y muchas veces lo hace de por vida.
EL LÁSER
Aplicar laser en la debida dosis y fluencia, logra una acción analgésica y antiinflamatoria. Dosis altas generan inhibición en el proceso de reparación, en lugar de lograr el estímulo curativo adecuado.
Más aún en pacientes inmunodeprimidos (post radioterapia o quimioterapia), pacientes ancianos y niños, en quienes la dosis debe ajustarse aún más baja.
El número de sesiones y la frecuencia es otro factor importante, que varía caso a caso.
LÁSER Y AFTAS
Las aftas se resumen en dos aplicaciones en general. Es muy bueno ver el resultado inmediato luego del laser, donde el dolor desaparece o disminuye mucho, completando la curación en la sesión siguiente (a veces más de 2).
LÁSER y HERPES SIMPLE
Afecta una pequeña área.
Si lo aplicamos antes de la fase de prurito (picazón) reduce la virulencia de la lesión. Si ya hay vesículas, aplicando el láser el dolor y la inflamación disminuyen o desaparecen. Ya cuando hay vesículas ulceradas el láser acelera la cicatrización, quita o reduce el dolor, evita infecciones y mejora la estética de la cicatrización.
LÁSER y HERPES ZÓSTER
Afecta todo el trayecto de un nervio o una rama nerviosa.
Igual al anterior, pero además PREVIENE la neuralgia post-herpética, así como otras consecuencias.
FOTO BIO MODULACIÓN
Sabemos que la cura existe, o al menos la mejoría inmediata. La Fotobiomodulación con Láser es el camino.
Las aplicaciones del láser son muchas, y el beneficio es grande.
“Mantener el cuerpo con buena salud es un deber, de lo contrario no seremos capaces de mantener nuestro cuerpo y mente fuertes y claros.” Buddha.