Tener un afta en la boca (conocidas también como «sapitos») es molesto. Nos incomodan o duelen, no podemos comer bien, o tragar o hablar. Son virus que tratamos con pomadas antivirales que a veces logran una mejora parcial, pero en general no logramos superarlo sino luego de varios días de soportar ese proceso.
Con los herpes sucede lo mismo: primero la zona enrojecida, luego las vesículas, hasta que deciden «secarse». Y eso pasa en los labios, en las comisuras, en la lengua, y en otras partes de la boca, cara y otras partes del cuerpo. Afectan mucosa y piel.
Hay dos herpes habituales: el herpes simple, que no conlleva grandes consecuencias y el herpes zoster que puede llegar a afectar nervios, alterando la capa que los recubre –la mielina- y perder funcionalidad. Incluso provocar parálisis, o parestesias o anestesias en la cara o boca.
LAS AFTAS
Si bien muy comunes, pueden ser tan molestas y dolorosas que nos impidan llevar una vida normal.
Medline (la biblioteca médica más grande en línea, y que contiene los artículos de investigación más serios y los más recientes) dice:
«Las aftas son pequeñas llagas redondas que aparecen en la boca. Pueden aparecer dentro de la mejilla, debajo de la lengua o detrás de la garganta. Por lo general tienen un borde rojo y un centro gris. Pueden ser muy dolorosas. No son igual al herpes labial, que son causadas por el herpes simple.
Las aftas no son contagiosas. Pueden salir por una infección viral. También pueden desencadenarse por estrés, alergias a los alimentos, falta de vitaminas y minerales, cambios hormonales o períodos menstruales. A veces la causa es desconocida.
En la mayoría de los casos, las llagas desaparecen solas. Algunos ungüentos, cremas o enjuagues pueden aliviar el dolor. Si tiene aftas, evite la comida picante y condimentada, eso también puede ayudar.»
¿Sólo eso? Quiero quitármelas ya!
EL HERPES SIMPLE
Sobre éste Medline explica:
«El herpes labial es causado por un virus muy contagioso llamado herpes simple. Existen dos tipos del virus del herpes simple. El virus del herpes tipo 1 que generalmente causa herpes orales o labiales. Este virus infecta a más de la mitad de la población de los EE.UU. para cuando llega a los 20 años. El virus del herpes tipo 2 generalmente afecta el área genital.
Algunas personas no tienen síntomas de la infección. Sin embargo, otras desarrollan llagas dolorosas y desagradables que duran una semana o más. El herpes labial suele aparecer fuera de la boca: en los labios, en el mentón, en las mejillas o en las fosas nasales. Cuando aparece dentro de la boca, suele hacerlo en las encías o en el paladar.
No existe una cura para el herpes labial. Algunas medicinas pueden aliviar el dolor y la molestia que causan. Estos incluyen ungüentos que adormecen las llagas, antibióticos que controlan infecciones bacterianas secundarias y ungüentos que ablandan las costras de las llagas.»
¿No existe cura? ¿Qué hago entonces?
EL HERPES ZÓSTER
Tomamos de Medline: «El herpes zóster es una enfermedad causada por el virus zoster.
Los primeros signos de herpes zóster incluyen ardor o dolor punzante y hormigueo o picazón, generalmente en un lado del cuerpo o la cara. El dolor puede ser leve o severo. Las erupciones o ampollas aparecen entre uno y 14 días después. Si aparece en su cara, puede afectar la vista o el oído. El dolor puede durar semanas, meses o incluso años después de que las ampollas han sanado.
No hay cura para el herpes zóster. El tratamiento temprano con medicamentos que combaten el virus puede ayudar. Estos medicamentos también pueden ayudar a prevenir el persistente dolor.»
Además puede causar parálisis facial, falta de sensibilidad parcial o total, en una o más de una zona.
¡Socorro!
EL LÁSER
Aplicar laser en la debida dosis y fluencia, logra una acción analgésica y antiinflamatoria. Dosis altas generan inhibición en el proceso de reparación, en lugar de lograr el estímulo curativo adecuado.
Más aún en pacientes inmunodeprimidos (post radioterapia o quimioterapia), pacientes ancianos y niños, en quienes la dosis debe ajustarse aún más baja.
El número de sesiones y la frecuencia es otro factor importante, que varía caso a caso.
LÁSER Y AFTAS
Las aftas se resumen en dos aplicaciones en general. Es muy bueno ver el resultado inmediato luego del laser, donde el dolor desaparece o disminuye mucho, completando la curación en la sesion siguiente (a veces más de 2).
LÁSER y HERPES SIMPLE
Afecta una pequeña área.
Si lo aplicamos antes de la fase de prurito (picazón) reduce la virulencia de la lesión. Si ya hay vesículas, aplicando el láser el dolor y la inflamación disminuyen o desaparecen. Ya cuando hay vesículas ulceradas el láser acelera la cicatrización, quita o reduce el dolor, evita infecciones y mejora la estética de la cicatrización.
LÁSER y HERPES ZÓSTER
Afecta todo el trayecto de un nervio o una rama nerviosa.
Igual al anterior, pero además PREVIENE la neuralgia post-herpética, así como otras consecuencias.
Las aplicaciones del láser son muchas, y el beneficio es grande.
«Mantener el cuerpo con buena salud es un deber, de lo contrario no seremos capaces de mantener nuestro cuerpo y mente fuertes y claros.» Buddha.