Estoy embarazada y quisiera blanquear mis dientes. ¿Afectará a mi hijo? ¡No quiero correr riesgos!
Durante el embarazo nos planteamos muchas cosas en pro de la seguridad del la vida que llevamos dentro. Hay muchos tratamientos médicos, odontológicos, cosmético e incluso medicaciones con los que nos surge esa duda.
Y con respecto a la lactancia también.
No se han hecho estudios clínicos sobre la seguridad de blanquear los dientes durante el embarazo, ni durante la lactancia. No hay estudios serios con suficiente casuística ni con estudios longitudinales relevantes: o sea, que no se estudiaron suficientes casos durante suficiente tiempo como para llegar a una conclusión.
Lo mismo acontece con la lactancia: No hay estudios clínicos determinantes.
Por lo tanto la Asociación Dental Americana (ADA) sugiere que «los clínicos consideren diferir el blanqueamiento dental durante el embarazo».
Por supuesto que la mayoría de los odontólogos sigue esta sugerencia, que se ha instaurado como el protocolo estándar de la comunidad dental, y por tanto recomiendan a sus pacientes no blanquear su dientes durante el embarazo ni durante tratamientos de fertilidad.
Conclusión: no hay información que indique que puede blanquearse con seguridad, pero tampoco hay información para que no lo haga.
Fuera de estos períodos, las sustancias blanqueadoras y sus derivados no se han encontrado en sangre, ni hay cambios en las concentraciones de las existentes.
Hasta ahora todo hace pensar que no hay consecuencias de ningún tipo.
Los buenos productos de blanqueamiento no son tóxicos. Están fabricados con materiales que se encuentran en el cuerpo o que el cuerpo desecha rápidamente: el peróxido de hidrógeno es la sustancia que directa o indirectamente (como peróxido de carbamida) se aplica. Opalescence es una marca comercial que nos da esa seguridad.
¡Es peróxido de hidrógeno es lo que conocemos como agua oxigenada! Las concentraciones varían, siendo la más baja 3,5% (Opalescence PF 10).
En realidad, la razón primera de no indicarlo es debido al temor a demandas: si hubiera algún problema con el niño es posible que se adjudique al blanqueamiento, sea o no el responsable.
Si te estás preguntando si deberías blanquear tus dientes durante el embarazo, tratamientos de fertilidad o lactancia, el consenso general es este: «Durante embarazos y tratamientos de fertilidad, las mujeres deberían esperar hasta ya no estar embarazadas para comenzar o continuar el tratamiento. Durante la lactancia, deberían consultar con su obstetra o ginecólogo.» (Fowler)
Hay una frase latina atribuida a Hipócrates como padre de la medicina occidental que es aplicada en ciencias de la salud y que significa «Lo primero es no hacer daño»: «Primum non nocere».
