Sangrado, mal aliento y retracción de las encías son incómodos y desagradables para nosotros y para nuestra vida social.
Pero esos son sólo los primeros pasos.
Luego vienen la retracción de las encías, la pérdida de hueso INVISIBLE (con o sin retracción), las bolsas periodontales, la movilidad dentaria, las infecciones agudas o crónicas y SILENCIOSAS.
Está demostrado (hace muchos años) que la enfermedad de las encías tiene CONSECUENCIAS EN TODO NUESTRO CUERPO.
Me duele hace mucho. Debo tomar analgésicos, antiinflamatorios, anticonvulsivantes, tranquilizantes y depresores (y muchas otras pastillas que no sé ni qué son).
Quedo mareada, perdida y debo acostarme.
No es así como quiero que sea mi vida. ¿Hay solución?
Hace unas semanas notificamos sobre un equipo internacional que desarrolló un método basado en el ADN que le da a los biomateriales crudos un metabolismo artificial.
Esto, de por sí, impresiona y es una enorme evolución en el campo de las ciencias biológicas.
Las restauraciones (“arreglos”) que tengo están feos. Quiero reemplazarlos sin estropear mis dientes. ¿Es posible?
Muchas veces buscamos los metales, o cambiar las resinas en mal estado, o las cerámicas opacas o con bordes oscuros.
La FDI (Federación Dental Internacional) ha recomendado recientemente que los atletas hagan de la salud oral su prioridad número uno.
Estoy cansada de ir al odontólogo una vez a la semana, ¡y no terminar nunca con mi boca! Quiero una solución rápida.
Tengo una fantasía…