Estamos aislados en cuarentenas impuestas o voluntarias. Pero es igual: nos vemos a través de una pantalla, y un metro nos separa.
A nuestros pacientes los vemos sólo en casos de real urgencia, y la primera consulta es virtual.
¿Qué podemos hacer? Estar cerca de nuestros pacientes es fundamental.
Primero:
Hacerles llegar nuestro saludo y preocupación, nuestros consejos sobre salud bucal, hacer llegar nuestro afecto.
Un mensaje interesándonos sobre su salud (general) y la de su familia en importante. Y preguntarles sobre su salud bucal, así como evacuar sus dudas e interrogantes.
Segundo:
Hacerles llegar consejos sobre cómo mejorar su higiene dental y bucal ya que la Organización Panamericana de la Salud/OMS: “Las enfermedades bucodentales pueden convertirse en un obstáculo importante para disfrutar de una vida saludable”.
Una técnica para cada paciente, revisando sus fichas clínicas y estudios radiográficos, así como la sugerencia de un cepillo y pasta dental para cada caso.
Tercero:
Para aquellos que gusten de conversarlo, podemos conversar sobre su Plan de Tratamiento ya hecho o por hacerse, permitiéndonos un intercambio muy rico y que nos aporta muchos datos, al igual que al paciente.
Cuarto:
Estar siempre en contacto. Tener el teléfono del consultorio transferido a un celular (o a un teléfono de nuetra casa) es importante para que la comunicación se mantenga.
Tener un Whatsapp para mensajes, fotos y/o videollamadas.
CÓLERA
Los amores de sus padres inspiraron al colombiano Gabriel García Márquez la que sería su novela favorita y por la que, según decía, le gustaría que fuera recordado: El amor en los tiempos del cólera. La publicó en 1985, tres años después de recibir el Premio Nobel de Literatura.
La novela es una de las más bellas historias de amor en fondo y forma con un lenguaje en el que García Márquez refleja los muchos y desconocidos sentimientos, describe magistralmente agonías y sensaciones amorosas. Se trata de una de sus novelas más poéticas hasta crear un tratado del amor, el romance, la pasión, el dolor y la espera. (fuente: WMagazín)
Ese título, y la novela en sí, me llevaron a hacer un paralelismo con la salud bucal en los tiempos que estamos viviendo.
¿QUÉ PUEDO HACER?
Definida por la OMS (Organización Mundial de la Salud) como “la ausencia de dolor orofacial, cáncer de boca o de garganta, infecciones y llagas bucales, enfermedades periodontales (de las encías), caries, pérdida de dientes y otras enfermedades y trastornos que limitan en la persona afectada la capacidad de morder, masticar, sonreír y hablar, al tiempo que repercuten en su bienestar psicosocial”.
La HIGIENE BUCODENTAL es fundamental, así como la HIDRATACIÓN y la ALIMENTACIÓN (Vitamina C y Zinc en una alimentación balanceada).
Otro aspecto es el cuidado es el BRUXISMO (en todas sus formas) que destruye nuestros dientes y hueso (retracciones, abfracciones, desgastes, movilidad, etc.), cuya base es el STRESS.
Si bien no es fácil en estos tiempos, bajar o eliminar el stress es importante para TODO nuestro cuerpo, mediante meditación, ejercicios, respiración (técnica Win Hof, por ejemplo).
FORMAS DE MEJORAR
Es de Erasmo de Rotterdam (1469-1536, Humanista neerlandés) la conocida máxima: “Mejor es prevenir que curar”.
Ir al odontólogo es una buena medida, no sólo para hacernos un control y una limpieza, sino para hacernos una limpieza profunda y un diagnóstico. Pero por ahora no podemos (estamos en “Tiempos de Coronavirus”).
Cada vez más, la salud bucodental está considerada elemento indispensable en la preservación de nuestra salud.
En este sentido, es primordial establecer unos hábitos de higiene bucal saludables que nos permitan reducir al mínimo el riesgo de contraer enfermedades.
CONSEJOS PRÁCTICOS
Cepilla tus dientes al menos 2 veces al día (3 o 4 mejor). Este es quizás el punto más básico e importante sin el que todos los demás no tienen sentido. Es esencial cepillarse los dientes después de cada comida y hacer uso del hilo dental y/o cepillos interdentales (Butler GUM Trav Ler, o InterProx de Vitis) para prevenir que las bacterias se acumulen en las encías y los dientes.
Puedes complementar tu higiene bucal de cepillado y uso del hilo dental con un enjuague que se adecue a tus necesidades. El agua oxigenada 10 vol también puede ser una buena idea en algunos casos. Consulta por whatsapp o teléfono.
Usa correctamente tu cepillo de dientes. Aunque pueda parecer intrascendente, la forma en que nos cepillamos los dientes es decisiva en la eliminación de las bacterias. Consulta cuál es la mejor técnica de cepillado. Debajo te dejo la Técnica de Bass modificada la que es MUY BUENA. Acá sólo los pasos:
1) Colocar a 45º el cepillo entre encía y diente.
2) VIBRAR (sin barrer) contando hasta 10 (puede ser rápido)
3) BARRER vertical, hacia el borde del diente o molar
4) REPETIR 5 VECES en cada zona que abarque el cepillo
Seleccioná un buen cepillo de dientes blando (soft) o medio-blando. Recomendaciones: Colgate Periogard, Curaprox 5460, Colgate Ultra Soft 5500, Sensodyne Complete Protection, Colgate Slim Soft Advanced.
Elegí una buena pasta dentífrica, que dependerá de tus necesidades. Algunos ejemplos: Colgate Total 12 (nueva fórmula), Sensodyne Repair o Complete. La Parodontax es muy buena para algunos casos.
Eliminá o reducí el consumo de tabaco. Las encías de los fumadores son más susceptibles a las infecciones porque el tabaco causa una falta de oxígeno en el torrente sanguíneo, lo que reduce el flujo de sangre y nutrientes hacía las encías.
Hidrátate bien. La saliva está considerada un protector de nuestros dientes y también un eficaz desinfectante. De esa manera, la falta de saliva hace que las probabilidades de contraer una enfermedad bucodental puedan aumentar.
HIGIENE, VENCER STRESS, HIDRATACIÓN, ALIMENTACIÓN
TÉCNICA DE CEPILLADO: BASS MODIFICADA
La técnica de Bass modificada consiste en colocar el cepillo en un ángulo de 45º en la unión del diente y la encía. Parece muy complicado pero no lo es tanto.
Para que nos entendamos, el objetivo es que las cerdas del cepillo “entren” en el surco gingival (en la unión entre el diente y la encía) para poder limpiar la zona donde más se acumula la placa bacteriana.
Para ello, se realiza un movimiento de vibración (sin cambiar la posición del cepillo, o sea: no barrer!) y para terminar de limpiar la zona hacemos un barrido hacia abajo (si estamos limpiando la parte superior) o hacia arriba (si estamos limpiando la parte inferior).
En resumen:
1) Colocar a 45º el cepillo entre encía y diente.
2) VIBRAR (sin barrer) contando hasta 10 (puede ser rápido)
3) BARRER vertical, hacia el borde del diente o molar
4) REPETIR 5 VECES en cada zona que abarque el cepillo
Después, cambiamos a la zona contigua y así hasta limpiar toda la cara vestibular, es decir, toda la cara externa de los dientes. Luegos las otras caras (lingual o interna) y con movimientos circulares la masticatoria.
Cuidate. #noscuidamosentretodos con Amor en los Tiempos del COVID-19.