Quiero arreglarme mi boca. Y sea lo que fuere que necesito (carillas cerámicas o de resina, o implantes, ortodoncia, tratamientos de encías, o de bruxismo, etc.) quiero que me duren igual muchos años. ¿Es posible?
LONGEVIDAD EN ESTÉTICA, FUNCIÓN, SALUD
Todos podríamos tener algo en nuestra boca (o partes aledañas) que necesiten una corrección, mayor o menor.
Lo importante es que debemos RESPETAR las estructuras dentarias, óseas, gingivales y mucosas.
Para ello buscamos de aplicar siempre la Odontología Mínimamente Invasiva (o la más conservadora, para entendernos mejor). Pero siempre con sensatez.
¿En qué se basa esa sensatez? En el tiempo que durará el tratamiento. Pongo como ejemplo un tratamiento de conductos: el propio especialista en endodoncia NO REALIZA todos los que se le presentan, sino que trasmite al paciente y a los otros colegas del equipo el PRONÓSTICO (la duración y cómo le irá) de esa pieza si se hace tratamiento. De ser POBRE el PRONÓSTICO, se optará por otro camino para tratar esa pieza.
Así es con todo: se toma en cuenta el tiempo que va a durar el tratamiento, y ese es un factor fundamental de elección y determinación.
No pensamos en meses o años, sin que buscamos PENSAR EN DÉCADAS.
RESPETO POR LOS DIENTES; HUESO Y ENCÍAS
Este es otro de los elementos a tener en cuenta para definir un tratamiento: no desgastar los dientes, preservar hueso, evitar la retracción de encías, y otros.
Este respeto, tiene mucho que ver con el anterior sobre la longevidad, porque cuando más hueso preservemos, o menos diente desgastemos, más va a durar ese tejido y la salud bucal en general.
Por supuesto, y a riesgo de ser reiterativo con los lectores asiduos, es importante saber que debemos manejarnos con sensatez.
Todo caso es diferente, tiene sus necesidades y deberá ser planificado con esos objetivos: RESPETO Y LONGEVIDAD.