Quiero mi boca saludable y hermosa. ¿Lo puedo lograr con resinas o debo hacerme carillas de cerámica?
La respuesta es que Cerámica y Resina son materiales muy diferentes, que coinciden en un mismo objetivo: hermoso color y perfecta estética. Pero unas y otras tienen indicaciones diferentes: en un caso convendrá utilizar cerámica, y en otro lo mejor será utilizar resina.
¿CERÁMICAS O RESINAS?
Depende del caso de tu boca, haremos la elección según el problema que tengas.
Por cerámica entendemos un grupo de materiales que tienen características diferentes entre ellas mismas.
Las Resinas son un material con relleno inorgánico en una matriz orgánica.
DUREZA
Hay algunas cerámicas que permiten un desgaste, que si bien es menor, se asemeja bastante al del esmalte. Esto es bueno, muchas veces.
Hay otras que tiene una dureza extrema y son muy resistentes a los golpes o bruxismo.
En el universo de resinas, encontramos algunas más resistentes que otras, incluso con rellenos de circonio (como Mosaic y Forma de Ultradent).
Las resinas tienen menos dureza superficial que las cerámicas, pero eso no invalida que sean el material de elección en muchos casos.
Lo importante: las cerámicas devuelven resistencia al diente (Magne-Belser), y las resinas aún no (es esta etapa de la evolución de los materiales).
TRANPARENCIA, TRANLUCIDEZ, OPACIDAD, OPALESCENCIA, IRIDISCENCIA
Estos son sólo algunas de las características ópticas de los materiales estéticos. Cerámicas y Resinas cuentan con dichas propiedades y muchas más.
Sin embargo, a la hora de restaurar solo un diente e igualarlo a su vecino, prefiero trabajar con Resinas, ya que me permiten mayor libertad y posibilidades para alcanzar el objetivo.
Si bien con ambos materiales podemos lograr restituir el comportamiento óptico de la pieza (o piezas) a realizar, habrá veces que utilizaremos resinas, y otras que utilizaremos cerámicas
FLUORESCENCIA
¿Fuiste a una fiesta en la que había luz ultravioleta? (luz “negra”). ¿Viste que los dientes se ven diferentes? Hay restauraciones que se ven oscuras (casi negras) y otras muy brillantes.
Eso es un problema de fluorescencia. Lograr EQUILIBRAR LA FLUORESCENCIA es para especialistas en estética. Se necesitan luces ultravioletas (más de una, sumada a la de VALO) y una resina que permita regular la fluorescencia como Vit-l-escence o Mosaic (ambas de Ultradent). Hoy prefiero Mosaic, ya que logro los mejores resultados.
Esto no quita que otros colegas logren excelentes resultados con otras resinas.
DIFUSIÓN
Si tenemos un caso que debe restaurar una parte del diente, no queremos que se note la diferencia. Por ello, la resina (o cerámica) debe tener muy buena difusión. Hay tono específicos de resina (y otros de cerámica) que si la tienen.
Por ello lo importante es elegir el material con las condiciones que necesitamos. Como todos los casos son diferentes, serán también diferentes las elecciones que hagamos.
CONCLUSIÓN
Lo que debemos tener claro es que no hay un material mejor que otro. Hay casos diferentes y materiales óptimos para cada paciente, diente o situación.
“En un bosque se bifurcaron dos caminos, y yo… Yo tomé el menos transitado. Esto marcó toda la diferencia”. Robert Frost (1874-1963) Poeta estadounidense.