Me dijeron que el blanqueamiento láser es muy rápido, que se hace en una sola sesión, y que es definitivo. No sé si duele o si es caro. ¿Qué hay de cierto en esto? Yo quiero que quede natural y saludable. ¿Se puede?
El blanqueamiento láser se realiza con una unidad láser y un gel o agente blanqueador especial que se activa con la luz: se ve el cambio de color y consistencia del gel minuto a minuto.
¿El blanqueamiento láser es rápido?
Si. Los resultados son visibles rápidamente. Los dientes quedan más blancos inmediatamente después de la sesión en el dentista de 16 minutos a media hora.
¿Se hace en una sola sesión?
No siempre. Muchas veces requiere una, otras dos y a veces tres o más. El número de sesiones (así como el tiempo de cada una) dependerá de la tonalidad dental de cada persona antes del tratamiento, de su estructura dentaria y de la permeabilidad de esta. Nosotros incluimos otras sustancias para obtener un mejor resultado.
¿Es definitivo?
No. Todos los blanqueamientos, con láser o no, requieren de controles y mantenimiento. Tanto en el blanqueamiento como en su duración.
Es posible prolongar el buen resultado con una crema dental especial, utilizándola alternadamente (un mes si y un mes no) o antes de un evento importante en nuestra vida.
¿Es costoso?
Contrariamente a lo que se supone el blanqueamiento láser es menos costoso que otros blanqueamientos.
¿Es doloroso?
Al contrario. Es uno de los blanqueamientos más seguros y que dan poca o ninguna sensibilidad.
¿Queda natural?
Si. Por supuesto. Nos gusta que el paciente se vea mejor, y que se logre el blanco más natural y apropiado, sin que quede artificial. Si buscás eso, no vengas.
¿Se mejora la salud de los dientes?
Si. Siempre. Pero el odontólogo debe decidir si es el método más apropiado. Todos los pacientes son diferentes y responden en forma diferente.
Únicamente un buen profesional de confianza te asesorará debidamente y te ayudará a lucir tu mejor sonrisa a la vez que mejoras tu salud bucal.
Es rápido, seguro, eficaz, natural y saludable.
BLANQUEAMIENTO LÁSER: MITOS Y REALIDADES
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